¿Por qué contratar a un chef personal para tus vacaciones?
Si eres como muchos de nosotros, amantes de la comida, cuando estás a punto de irte de vacaciones, lo primero en lo que piensas es en toda la deliciosa comida que vas a comer. Al fin y al cabo, las vacaciones son el momento perfecto para relajarse, disfrutar y compartir una buena comida con los amigos y la familia.
Para las familias ocupadas, irse de vacaciones requiere mucha planificación y logística, especialmente cuando se trata de organizar las comidas de cada día. Por eso, muchas personas recurren ahora a chefs privados para que preparen platos y menús gourmet, que tengan en cuenta las diferentes preferencias y restricciones dietéticas del grupo.
¿Qué es un chef personal?
Un chef personal o chef privado es un cocinero profesional que prepara las comidas en la casa o el alquiler de vacaciones de su cliente. Ofrece un servicio personalizado creando un menú a medida según las preferencias y restricciones dietéticas del cliente.
Los chefs personales ofrecen sus servicios para ocasiones especiales, clases de cocina, menús semanales y mucho más.
Algunos de ellos están incluso dispuestos a viajar para satisfacer ciertas peticiones. Contratar a un chef personal es un servicio al alcance de todos, ya que los chefs se ajustan a su presupuesto y preferencias.
Es una forma práctica de ofrecer comidas deliciosas a tus seres queridos. Por no decir que es una experiencia gastronómica única.
Ventajas de contratar a un chef privado en vacaciones
1) Simplifica la compra de alimentos
Existe la creencia generalizada de que cuando se contrata a un chef privado, éste sólo se encarga de cocinar y servir. Sin embargo, los chefs personales hacen mucho más que eso. De hecho, se encargan de todo: la compra de alimentos, la planificación del menú, el servicio y la limpieza.
Cuando estás de vacaciones, lo último que quieres hacer es ir corriendo al supermercado todos los días. Contratar a un chef personal te quita esta tarea de encima para que puedas disfrutar de tus vacaciones y relajarte al máximo. Lo mejor es que el chef elige los ingredientes locales más frescos en función de tu presupuesto y tus gustos.
2) Servicio personalizado
Una de las razones por las que a la gente le gusta tanto contratar chefs personales es que éstos ofrecen un servicio personalizado. Pueden cocinar tu comida favorita, ya sea asiática, india, francesa, americana... no hay límites cuando se trata de planificar un menú personalizado.
¿Uno de tus invitados no come carne? ¿A alguien no le gusta el ajo? Tu chef tendrá en cuenta las necesidades dietéticas de cada uno de tus invitados para que todos estén contentos. El chef también está disponible en función de tus necesidades, ya sea por un día, una semana o más.
3) Los chefs personales pueden cocinar para grandes grupos de personas
Una de las principales razones por las que la gente contrata chefs privados es para evitar tener que lidiar con las molestias que conlleva cocinar para un grupo grande de personas. Cuando alquilas una casa de campo con tu familia o tus amigos, ya hay suficiente planificación que hacer… así que evita preocuparte por la comida.
Cocinar para un grupo grande no es lo mismo que cocinar para tu pareja o tu familia cercana, requiere mucho más tiempo y preparación. Los chefs privados simplifican la planificación de la comida y la hacen divertida para todos. Contratar a un chef es una gran manera de hacer que sus vacaciones sean más memorables y relajantes.
4) Selección y variedad
Incluso si eres un amante de la comida y te encanta cocinar, es probable que a menudo cocines las mismas recetas cuando organizas fiestas o recibes visitas de tus amigos.
Contratar a un chef privado es una gran manera de aprender nuevas técnicas culinarias y recetas. Además, ¡compartirás una experiencia gastronómica increíble con tus invitados y probarás nuevos sabores!
5) Se tienen en cuenta todas las restricciones dietéticas de tus invitados
Cuando organizas una gran cena, tienes que hablar con cada uno de los invitados para ver si hay alguna alergia o necesidad dietética especial que haya que tener en cuenta.
Cuando contratas a un chef personal, puedes acomodar a los que comen carne, a los vegetarianos, a los veganos o a las personas con alergias (cacahuetes, gluten, etc.). El chef se asegura de que cada plato se adapte a sus necesidades y de que todo el mundo esté seguro.
6) No hay tareas de limpieza, el chef se encarga de todo por ti
Cocinar para un gran grupo de personas es una cosa, pero limpiar después de la fiesta es otra. Cuando cocinas para mucha gente, no tardan en amontonarse los platos y, seamos sinceros, a nadie le gusta limpiar los platos y ordenar la cocina durante horas en las fiestas.
Afortunadamente, cuando contratas a un chef personal, no tienes que preocuparte por la limpieza. Puedes disfrutar del tiempo con los amigos y la familia o tomar una copa de vino extra mientras tu chef se encarga de la limpieza posterior a la comida. Todo lo que tienes que hacer es disfrutar de la deliciosa comida y de la compañía de tus invitados.
7) Puedes disfrutar de la compañía de tus invitados
Otra de las ventajas de tener un chef personal cuando alquilas una casa de campo es que puedes pasar tiempo de calidad con tus invitados sin ninguna distracción. No tienes que estresarte ni preocuparte por si a tus invitados les va a gustar la comida o si va a haber suficiente comida para alimentar a todos.
De hecho, cuando contratas a un chef privado no tienes que mover un dedo porque él se encarga de cocinar, servir y limpiar. Esto significa que tendrás mucho tiempo libre para pasar con tus amigos, vecinos o familiares.
¿Cómo contratar a un chef personal para tus vacaciones?
¿Has decidido que quieres contratar a un chef privado para que tus vacaciones sean realmente memorables y relajantes? Estás a sólo unos clics de tener una experiencia culinaria única.
Contratar a un chef personal es muy fácil con Miummium, todo lo que tienes que hacer es registrarte como cliente, navegar por los chefs de tu ciudad, y luego contactar con los chefs de tu elección en sus perfiles para discutir la disponibilidad, las opciones de menú y los precios.